El primer paso: tu CV
Tu CV es, junto con tu carta de presentación, el documento por el que las empresas te conocerán. Tienes modelos a tu alcance para preparar el CV perfecto para tu primer empleo.
Pero para prepararlo es necesario que estudies el mercado y adaptes tu candidatura. Lo mejor es que hagas una pequeña investigación del sector al que quieres optar. Destaca la formación más acorde con el puesto y las prácticas que hayas realizado. Explica lo que has aprendido y los logros que has conseguido, te destacarás frente al resto.
No tengas miedo de presentar tu autocandidatura. De hecho, estas acciones se valoran por las empresas porque implican motivación. Después de tu investigación del mercado concentra tus esfuerzos en las empresas que te interesen y en ofertas concretas.
La experiencia no profesional y las redes
La experiencia para optar a un puesto de trabajo suele ser uno de los principales requisitos. Pero esa experiencia puede ser de muchos tipos.
Entre ellos está el voluntariado. Se trata de actividades no remuneradas que sin embargo están asociadas a responsabilidades y habilidades. A pesar de que no hayas percibido un sueldo, esta experiencia dirá mucho de ti. Entre otras cosas, que sabes trabajar en equipo, que tienes grandes habilidades sociales y que te implicas. Las empresas valoran mucho estos aspectos.
Para buscar empleo las redes sociales son también de gran ayuda y debes cuidarlas. Los reclutadores buscarán tus perfiles para encontrar información sobre tí más allá de tu CV. Por eso, desecha de ellos toda la información que pueda perjudicar tu imagen y configura las opciones de privacidad. Elige también tus fotos, son unos de los elementos que más impactan. Crea cuentas o adapta las que tienes para mejorar tu perfil profesional.
Muévete: las claves de la formación continua
En el mercado laboral estar actualizado es fundamental. Si los estudios que has realizado no son lo suficientemente específicos para el trabajo que quieres, puedes plantearte ampliar tu formación. Con un master, un posgrado, un doctorado o una FP. La formación complementaria y especializada es un valor en alza.
Hay también otros tipos de formación que las empresas valoran. Por los conocimientos que se adquieren y por las actidudes que implican. Se trata de la asistencia a eventos. Tanto virtuales como presenciales. Organizados por las propias empresas o instituciones. Charlas, conferencias, mesas redondas; entre otros. En ellos adquirirás conocimientos específicos y actualizados. Y son también el escenario perfecto para establecer redes profesionales de contactos.
Entre estos eventos se cuentan también las ferias de empleo. En ellas podrás conocer el estado del mercado laboral y entrar en contacto con profesionales de tu sector. Son imprescindibles para que buscar un empleo sea más fácil.
Síguenos en nuestras RRSS
Te puede interesar
Contenido relacionado